ÁLBUM DE FOTOS: (YoonSeok) Venganza

Título: Venganza

Pareja: YoonSeok (Suga + J-Hope)

Tipo: Yaoi

Géneros: PWP

Clasificación: G/PG

Descripción: J-Hope y Suga se ven obligados a dejar atrás algo valioso para ellos. Las personas que lo provocaron deberán pagar por eso.

Advertencias: Ninguna

Notas: ¡Aquí está el resultado del primer pedido del reto ''Álbum de fotos''! Dedicado obviamente a Angie, que fue quien tuvo la amabilidad de pedirlo. Espero que te guste. Igual que espero que le guste a todo el que le apetezca leerlo. Y si vosotros también queréis participar no tenéis más que hacerlo. Es muy fácil y no os cuesta nada más que buscar una imagen y mandar un comentario por donde os venga mejor. ^^

(Imagen por Angie)

A tales horas de la madrugada tan solo se escuchaba la sirena del coche de policía que iba en su busca. Los chicos corrían desesperados por las calles de aquel barrio desierto y oscuro, metiéndose en los callejones para despistar a aquellos dos estúpidos policías. Por su culpa habían perdido más de la mitad de los botes de pintura en spray que usaban para hacer los graffitis. Entre los dos habían ahorrado para comprar una variedad decente de colores y ahora habían tenido que salir corriendo, sacrificándolos para no ser atrapados.

Tampoco es que hubieran estado haciendo algo terriblemente malo o ilegal. Al menos, no era lo peor que se podía hacer ¿No? Eso era lo que opinaban ellos. No es como si los hubieran descubierto tratando de vender droga.

El sonido de la sirena ya era un poco más lejano, pero no podían confiarse. Esos policías estarían dando vueltas por las calles durante unos minutos por si acaso y después, se cansarían y se irían a otra zona. Así que lo que hicieron fue buscar un lugar para esconderse hasta considerar que ya había pasado el tiempo necesario para poder salir sin arriesgarse a pasar la noche en comisaría.

Al salir del último callejón en el que habían entrado se encontraron de frente con la famosa pista de skate del barrio, ahora vacía. Corrieron hacia allí y se tiraron al suelo, escondiéndose tras una de las rampas de esta. Supuestamente allí no debería poder verles nadie. Al menos nadie que pasara por la carretera.

El silencio se hizo durante unos segundos que parecieron eternos, hasta que por fin dejaron de escuchar el coche de policía merodeando por la zona.

-¡Te dije que metieras los botes que ya no usabas en la mochila por si acaso teníamos que salir corriendo! -Exclamó de repente Suga, dándole un pequeño empujón a J-Hope, con indignación.- Ahora los habrán requisado, como siempre.

-¡Ah! -Se quejó el chico al recibir el golpe en el hombro, mirando a su amigo.- Yo no era el único que estaba allí y desde luego no estaba gastando todos esos botes. Ha sido cosa de los dos. Tú también los dejabas en el suelo. -Le respondió, defendiéndose de la acusación. No iba a dejar que Suga le hiciera sentir el único culpable de la perdida de colores.

Suga no respondió al instante. En su lugar, quedó pensativo durante un momento. Debía admitir que su amigo tenía razón en eso. Había sido un error de los dos. Uno que le molestaba muchísimo.

-En fin ¿Cuantos han quedado? -Le preguntó. J-Hope era quien llevaba la mochila. Ni siquiera la llevaba a las espaldas. Había salido corriendo con ella en brazos.

La abrió, poniendo una mala expresión nada más ver la poca cantidad que había allí dentro.

-Cuatro o cinco. -Le informó tras echar un vistazo.

-Mierda. Teníamos diecisiete. -Refunfuñó Suga, cansado de estar en el suelo y poniéndose en pie de mala gana.

J-Hope miró hacia arriba, siguiendo a su amigo con la mirada. A él no le importaba tanto como a Suga, quien parecía realmente molesto. Pero aun así no le gustaba verle de esa forma.

-Toma. -Le dijo sin aviso, lanzando uno de los botes que había quedado hacia Suga. Era de color naranja.- Vamos en busca de venganza.

A Suga casi se le cayó el bote al suelo, no esperándose que fuera a lanzarlo de esa forma. Pero cuando lo tuvo entre sus manos y escuchó a J-Hope, casi pareció que se le había iluminado la mirada.

-Eso. Se van a cagar.

Riendo, subió la rampa tras la que había estado escondido de un salto, ya que no era demasiado alta. J-Hope sacó uno de los botes para sí mismo con la intención de seguirle y cargó con la mochila a sus espaldas.

Al día siguiente cuando los policías llegaron a la comisaría temprano para comenzar a trabajar, encontraron los cristales de casi todas las ventanas pintados. Los chicos no recuperarían esos botes de spray por los que habían tenido que ahorrar, pero ellos tendrían mucho trabajo intentando limpiar ese desastre.