(YeWook) A second chance to make you happy -Serial- Capitulo 7

Nota: ¿Qué consecuencias creéis que tendrá lo ocurrido al final del capítulo anterior? En este podréis descubrirlo. Poco a poco queda menos para el final y las cosas no podrían ser más complicadas. O no.

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La puerta de mi habitación seguía cerrada a la mañana siguiente de tener a Yura en mi casa. Aquello fue lo primero que me alivió un poco. Cuando me levanté para ir al baño eché primero un vistazo al salón y vi que ella ya no estaba ¿Ahora resultaba que había estado diciendo la verdad? La verdad es que me sorprendía.

Pero así era. Se había ido temprano tal y como le dije y no había señales de nada raro, así que me quedé un poco más tranquilo. Aunque seguía pensando en ello como algo que me daría algún problema con RyeoWook ¿Habría hecho simplemente una buena acción o lo habría estropeado todo como el tonto que era y siempre fui?

Me fui a trabajar pensando en ello. Cuando RyeoWook llegara a la tarde se lo explicaría todo. Si tenía que enterarse que al menos fuese por mí y no por otros. Sabía que se iba a enfadar, pero quizás de esa forma el enfado no sería tan grande... Esperaba.

El día pasó desesperadamente lento. Por fin la tarde llegó, pero RyeoWook no aparecía. Al principio pensé que podría haberse entretenido con algo. Pero los minutos e incluso las horas pasaban y no había rastro de él por la cafetería, tal y como me había prometido.

Me estaba empezando a poner nervioso. Y a asustarme, sobre todo eso. No podía dejar de pensar en lo de Yura o aún peor, que KyuHyun hubiese conseguido convencerlo para volver con él. Al final, decidí llamarle.

-Joder... -Murmuré cuando lo intenté un par de veces y en ninguno de los intentos hubo una respuesta ¿Qué habría pasado ahora?

Quería irme ya a casa. Se me habían quitado las ganas de todo. Menos mal que no faltaba mucho para poder hacerlo.

En cuanto terminé de trabajar me despedí de mi madre y fui directo a casa sin dejar de pensar en lo que podría estar pasando. Quizás luego fuese una tontería, pero necesitaba saber ya qué era.

Cuando llegué lo primero que hice fue mandarle un mensaje a RyeoWook. No me había respondido a las dos llamadas, pero por intentarlo una vez más no perdía nada. Esta vez el resultado fue diferente, pero no mejor del que esperaba.

''¿Qué quieres?"

¿Qué quería? ¿Qué clase de respuesta era esa después de lo que había pasado y me había dicho el día anterior?

"Hablar contigo. No has venido y no me respondías. Estaba bastante preocupado"

"Ah, vale."

Definitivamente había pasado algo. Y estaba enfadado. Debía tener mucho cuidado con lo que decía.


"¿Qué pasa? Dímelo... "

"¿Te lo pasaste bien anoche?"

Lo sabía.

"... No es lo que estás pensando. Te lo juro. Solo vino a pedirme ayuda porque la echaron de casa. Ha dormido en el sofá y se ha ido. Eso es todo"

"¿Esa es la excusa que pensabas decirme?"

"No... Es la verdad. Te lo iba a contar esta tarde."

"Ya. La verdad, claro. A la próxima avisa a tu amiguita de que quieres mentir y así no sube fotos para que todos sepan lo que habéis hecho."

¿Fotos? No tenía ni idea de lo que estaba hablando. Anoche no me había hecho ninguna foto con ella. De hecho, jamás había existido una sola foto nuestra juntos. Estaba empezando a asustarme de verdad.

"No sé nada de ninguna foto, RyeoWook. Anoche no hicimos nada... "


No me respondió. Directamente me pasó una imagen.

No podía creer lo que estaba viendo. En la foto salía yo en mi cama y sin camiseta, tal y como había dormido la noche anterior. Pero eso no era lo peor de todo. Ella estaba recostada a mi lado, haciéndonos la foto. Parecía ir desnuda porque se notaba que de cintura para arriba no llevaba nada, aunque en la foto no se le llegaban a ver los pechos porque se tapaba con la manta. Estaba echada hacia mi lado y me acariciaba el pelo mientras yo estaba dormido y no me enteraba absolutamente de nada.

No podía ser real. Aquello no podía estar pasando. Sentía que en cualquier momento iba a ponerme a llorar. No sabía qué decirle. En tan solo un instante volvía a estar perdido.

RyeoWook volvió a mandarme algo.


" Vaya nochecita hemos pasado ;) Te quiero, bonito miooo "

Supuse que aquello sería lo que Yura había escrito acompañando a la foto. No sabía como sentirme. Demasiados sentimientos juntos a la vez. Miedo, enfado, rabia, desesperación...

"No sabía nada... "

"Claro. No sabías que ella haría una foto y así os descubriría ¿No? Deja de decir eso, por favor. Está claro que no puedo volver contigo. Siempre tiene que pasar algo. Cuando estamos bien aparece alguna. Da igual que pasen años."

Aquellas palabras me terminaron de destrozar. No pude evitarlo más y empecé a llorar. Me sentía tan impotente en aquel momento, de nuevo.


"No hicimos nada, igual que no lo hice hace años. Yo nunca haría eso... "

"Pues la foto no dice lo mismo."

''Me engañó. Me dijo que simplemente se quedaría durmiendo en el sofá. Yo no sabía nada de esa foto. Estaba dormido cuando la hizo. Se coló en mi habitación para hacer eso. No hicimos nada..."

''Eso no quita que la dejaras pasar la noche en tu casa."


No tenía con qué defenderme de aquel argumento. Él tenía razón. Sería cierto que no hicimos nada pero eso no cambiaba el hecho de que le dejé dormir en mi casa sabiendo que no podía confiar en ella. Era culpa mía. Si hubiese sido más duro con ella nada de aquello habría pasado.


''Lo siento mucho... ''

''Ya. Ya hablaremos si eso.''


***

Toda la lucha, las palabras, aquella hermosa noche juntos... Las promesas. Nada había servido y todo habia quedado como un increible y lejano sueño.

Pero mi vida era más bien una horrible pesadilla.

No había vuelto a hablar con él, pero lo había intentado. Le mandé mensajes, intenté llamarle en pleno momento de desesperación, llorando y sin saber ya qué hacer. Pero nunca recibí una respuesta. Y quizás, solo quizás, era mejor así. Seguramente volvería a destrozarlo todo una vez más...

Un día, algo llegó a mi buzón. Algo que ojalá nunca hubiera visto. Era la invitación a la boda de RyeoWook y KyuHyun.

Al principio no podía creer que eso estuviese ahí ¿En serio se habían atrevido a mandarme la invitación? ¿Era una broma de mal gusto? Y sobre todo... ¿En serio había vuelto con él? No entendía el porqué después de todo lo que me había contado y había pasado entre nosotros. Si aun así volvía con KyuHyun era por algo. Entonces ¿Por qué me dijo todo lo que dijo...?

El mandarme la invitación era algo que podía creer de KyuHyun. Tras la segunda cena en su casa estaba seguro de que nuestra amistad ya era historia. Y después de lo que me había dicho RyeoWook, le veía aún más capaz de hacer aquel tipo de cosas para demostrar lo que él tenía y simplemente, hacer daño ¿Pero RyeWook?

No quise precipitarme. Quizás RyeoWook no sabía nada. Quizás había sido un error o incluso las invitaciones habían sido mandadas antes de la cena. Todo podía ser posible. No serían tan hijos de puta como para hacerme eso ¿No?

Aunque no quería saber nada del tema, la cogí y subí a casa con ella en la mano. Luchaba por contenerme y no romperla. Pero tampoco sabía por qué guardarla ¿De qué me iba a servir a mí ese horrible trozo de papel? Tan solo me recordaría los motivos por los cuales mi vida estaba siendo una mierda. Aunque pensándolo mejor, así podría mirarla cada vez que echase de menos a RyeoWook y recordar lo idiota que era por dejarle escapar de nuevo.

En fin. Lo metí en un cajón e intenté olvidarme de lo que acababa de ver.

Seguramente estaba siendo demasiado cruel conmigo mismo, pero era increíble la forma en la que había vuelto a meter la pata tan rápido. Ya ni siquiera tenía ganas de llorar o de enfadarme. Yo me lo había buscado ¿Por ser bueno? Puede ser. Pero sabía lo que había y aun así, acepté.

Las cosas no podían ir peor. Había perdido a RyeoWook y a KyuHyun al mismo tiempo y para colmo, todas las personas que habían visto aquella maldita foto con Yura creían que realmente tenía algo con ella. Incluso cierta persona muy cotilla que conocía tuvo la poca vergüenza de llamarme para preguntar sobre el tema. Solo para eso.

De Yura no había querido volver a saber nada. Podría haberle dicho absolutamente de todo. Podría haberle llamado por nombres terribles y nunca me habría arrepentido de ello, pero no lo hice. No quería prestarle más atención a esa maldita desgraciada. No la merecía.

Por otro lado, mi madre no hacía más que insistir para que saliera por ahí con otros amigos y de paso conociera a gente nueva, pero no estaba de humor para eso. Aunque mi madre era demasiado insistente y siempre lograba salirse con la suya.

Esa misma tarde recibí una visita que no necesitaba.

-¡JongWoon, cuanto tiempo! -Exclamó JungSoo en cuanto abrí la puerta. Parecía estar muy feliz por verme.

Entró sin necesidad de ningún permiso. Tras él iban HeeChul y YoungWoon. Ellos también se colaron descaradamente en mi casa. Los tres me abrazaron, me achucharon, me dieron palmaditas en la espalda y me sonrieron como si fuese el día más feliz de sus vidas. Incluso empezaron a bromear enseguida. Uhm, sospechoso.

Intenté ser lo más amistoso posible y verme feliz por reunirme con mis amigos. A los tres les había conocido durante mi época en el instituto. Aunque cada uno de nosotros tenía su vida ya hecha, de vez en cuando nos seguíamos viendo. Cuando lo hacíamos era como volver a aquellos tiempos donde eramos un equipo que iba junto a todas partes. La verdad es que les había echado de menos, pero no era el momento.

-Nos han dicho que últimamente no estás muy bien y nos han mandado a animarte. -Dijo YoungWoon, una vez ya sentado en mi sofá. Aquello me confirmó lo que ya estaba sospechando.

-Ya. Imagino quien habrá sido. -Comenté pensando en mi madre. Lo dicho. Siempre se salía con la suya. Daba igual las veces que yo le repitiese las cosas.

-Esta noche vamos a salir. Así que ya puedes empezar a animarte, eh. Y si no lo haces, ya procuraremos animarte nosotros. Pero hoy no te quedas en casa. -Esta vez fue HeeChul quien habló. Lo dijo con un tono que casi parecía una amenaza más que una invitación.

¿Salir esa noche? Ni ganas.

-No sé... Estoy muy cansado... -Intenté poner aquello como excusa. Fue una mala idea.

Los tres empezaron a hablar al mismo tiempo, seguramente intentando convencerme de lo contrario. Pero aquello era una descontrol. Ni siquiera entendía lo que me estaban diciendo.

YoungWoon se levantó del sofá y puso una de sus manos sobre mi espalda, con firmeza. Después sentí como me empujaba hacia el pasillo y vi que me acompañaba. Yo simplemente me dejaba llevar.

-Ahora vas a ir a ducharte y no vas a salir del baño hasta que lo hayas hecho. -Me decía mientras tanto, guiándome hasta allí. Aunque hablaba en un tono suave, de nuevo me dio la sensación de que trataban de amenazarme.

-De verdad que no tengo ganas. -Repetí ¿En serio iban a hacerme salir?

-Venga, hemos prometido que lo haríamos. Además, nos apetece estar contigo y pasarlo bien. Que últimamente no podemos reunirnos los cuatro juntos casi nunca.

Ahí debía darle la razón. La última vez que lo habíamos hecho había sido hacía siete meses. Quizás debía hacer el esfuerzo y salir con ellos a tomar una copa. Eso no podía hacerle daño a nadie y seguramente, aunque en ese momento no tenía ganas, me acabaría sentando bien. Además, si no lo hacía mi madre me mataría. Y después a ellos por fallar en la misión.

Al final acepté. Mi vida no podía detenerse por RyeoWook. Había vivido sin él durante años y podía volver a hacerlo. O eso esperaba. Debía ser positivo ¿No?