(YoonSeokHyung) Love dreams -Serial- Capitulo 13

Nota: ¡Hola a todos! ¿Qué tal os va? Un nuevo capitulo de este serial, después de casi dos semanas, pero bueno. Aquí ya podréis ver algunos detalles más de la historia. ¡Espero que os guste!

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-Holaaa. Me muero de hambre ¿Alguien podría traerme algo de comer? -Las palabras de Hoseok fueron acompañadas por su estómago rugiendo, que aclamaba por algo de lo que llenarse.

El sabía que lo estaban escuchando. Era consciente de que había dos vigilándolo porque cuando no protestaba los escuchaba hablar. Por eso mismo, seguiría insistiendo hasta que alguno le hiciera un mínimo de caso, aunque fuera solo por pesado.

-Os parecerá bonito tener aquí a uno encerrado y sin darle de comer ¿Qué os diría vuestro jefe si me dejarais morir de hambre? Creo que os mataría después -Podía seguir así cuánto hiciera falta.- Voy a seguir. No tengo nada más que hacer.

Hoseok seguía atado y encerrado. Envuelto en oscuridad por lo que ni siquiera sabía exactamente donde lo tenían. Tampoco era conocedor del tiempo que llevaba allí y qué hora sería ¿Y sus amigos? ¿Se habrían dado cuenta de su ausencia? ¿Lo estarían buscando?

Estaba harto de estar ahí. Las piernas las tenía completamente entumecidas. Y todo eso sin tener en cuenta las ganas de ir a un baño o la vejiga le reventaría. Ya se lo había hecho saber a sus dos vigilantes y habían pasado de él.

Muerto del aburrimiento, comenzó a tararear una canción. Era una canción que cantaba de pequeño y cuando más se aburría, le salía sola la canción. Tarareaba tranquilo, a la espera de algo que cambiase y pudiera salir de allí.


***

-Deberíamos haber avisado.

-Esto es culpa de los dos, así que vamos a encargarnos nosotros sin meter a los demás.

-Oye, a mí no me metas. Quien nos echó de la casa fuiste tú.

-Y tú te metiste para incordiar, pero no vamos a entrar en esa discusión ahora.

Yoongi y Taehyung caminaba siguiendo a uno de los chicos de Yoonseung que los llevaba por el lugar en la que su banda estaba instalada. Habían pedido hablar con él, porque necesitaban respuestas y misteriosamente habían aceptado llevarlos ante el líder sin oponer resistencia.

Cuando huyeron de su propio grupo para solucionarlo solos, esperaban que le dieran una buena negativa, sin embargo fue demasiado fácil. Aceptaron sin más.

-¿Y si nos equivocamos y aquí no encontramos nada más que peleas? ¿Qué les diremos a los otros? -Taehyung volvía a retomar la conversación tras unos segundos en silencio. Le susurraba muy bajito, con miedo a que los que les rodeaban le escuchasen.

-Tú siempre tan positivo, así te va -Ante sus palabras le lanzó un furiosa mirada, pero a Yoongi le daba exactamente igual. Necesitaba encontrar a Hoseok, de una manera o de otra.

-Vaya, vaya. Mirad quien tenemos aquí. A dos pijos que se creen “cools” -Yoonseung hizo énfasis en la última palabra, provocando que todos sus secuaces rieran por su impertinencia.

Yoongi tuvo que detener a Taehyung con una mirada para que no le contestase y les metiese en un problema. O peor, que no le dijeran nada de Hoseok. Algo le decía que sabían algo.

-Queremos saber algo -Levantando la voz, Yoongi habló cuando las risas fueron menguando.

-¿El qué? ¿Y por qué no han venido el resto de vuestros amiguitos? ¿Es que os habéis peleado y ahora queréis uniros a mí con el rabo entre las piernas? Es normal, si nosotros somos los mejores -Las risas comenzaron de nuevo, esta vez haciendo más daños al orgullo de ambos, pero debían mantenerse serenos.

-Solo queremos una información sobre el paradero de uno de los nuestros. Algo me dice que sabes más de lo que aparentas -En esta ocasión las palabras de Yoongi cortaron en seco las risas.

-Así que habéis perdido a uno de los vuestros, qué interesante… -Algo en la mirada de Yoonseung le transmitía que eso ya lo sabía, tal y como sospechaba.

-Pero eso ya lo sabes tú ¿No? Lo que nos interesa es que nos digas su paradero -Yoongi se mantuvo en su línea, sereno y tranquilo, sin dejarse intimidar.

-¿Qué te hace pensar que yo sé dónde está tu amigucho?

-Tu poco interés por saber qué ha pasado, porque ya lo sabes. Así que dinos donde está Hoseok. Queremos una explicación de donde está nuestro amigo -Aunque endureció su tono, Yoongi sabía que no podía pasarse o no les diría absolutamente nada.

-Eres todo un incordio y muy observador -Murmuró Yoonseung, tomándose unos segundos para ver que palabras iba a utilizar a continuación.- Sabemos dónde está, pero no podemos deciros donde.

-¿Por qué? -No tuvo más remedio que apretar los dientes y los puños. No soportaba su forma de hablarles y como se refería a Hoseok.

-Porque antes necesitamos saber algo. Tal vez vosotros tengáis esa información que queremos.

-¿Qué información quieres?

-Todo lo que sepáis de los agresores de vuestro amigo Hoseok, los que le han estado amenazando, los que van detrás suya. Necesitamos todo lo que podáis saber.

-Si tuviéramos esa información no estaríamos aquí ¿Para qué lo quieres? -La curiosidad se despertó en seguida en Taehyung, que habló en la conversación por primera vez.

Yoonseung dudó por un momento en si confiar en ellos y contarles lo que no sabía. Por el brillo de su mirada, Yoongi notó que en cuanto lo supiesen, estarían metidos en un buen problema.

-Sé dónde está vuestro amigo Hoseok y sé quién está detrás de todo lo que le ha sucedido. Es un grupo de camellos, como una mafia. Están intentando marcar su territorio en el mío y quiero tener información sobre ellos. Si queréis recuperar a vuestro amigo, os recomiendo que empecéis a indagar.

-No sabemos nada de ese grupo de camellos ni qué tienen que ver con Hoseok -Intervino de nuevo Yoongi.- Necesitamos más detalles sobre ellos, todo lo que nos puedas aportar.

-No voy a daros más información, buscaos la vida. Si queréis recuperar a vuestro amigo ya se os ocurrirá algo -Una ladina sonrisa apareció en el sombrío rostro de Yoonseung.

Yoongi estuvo a punto de decir alguna cosa indecente, de repudiarlo en su misma cara, pero por primera vez agradecido que Taehyung le agarrase del brazo para evitarlo. Tuvo que contar mentalmente hasta diez, intentar controlar su respiración y guardarse las ganas de ir y darle con la mano en su estúpido rostro hasta quitarle esa sonrisa.

-Daros por satisfechos -Con esas palabras, Yoonseung dio por acabada la conversación. Los había dejado igual que como estaban. Solo tenían un dato de quien iba tras Hoseok, pero no más.

Sin dar la opción de liarla más, se marcharon de allí escoltados como antes habían llegado.


***

Su mente estaba divagando por pensamientos, entre Yoongi y Taehyung ¿Qué sucedía entre ellos? Tenía en todo momento a los dos en mente. Había tenido tiempo de repasar cada una de las últimas situaciones de las que había vivido.

Tal vez Taehyung tenía razón cuando le dijo que tenía que aclararse, tal vez estaba muy indeciso y muy liado mentalmente. Pudo deducir a qué se refería, pero no sabía por dónde empezar. De verdad que estaba liado, muchísimo.

-¿Y por dónde empezamos...? -¿Se estaba volviendo loco? Escuchó la voz de Taehyung. Posiblemente fuera una ilusión, un producto de su imaginación, pero también hubo una segunda voz.

-Esto es más difícil de lo que pensaba -Esa voz era única y fácil de diferenciar.

-¡Eh! ¡Estoy aquí! -Comenzó a gritar con todas sus ganas para que sus dos amigos le escucharan.- ¡Chicos! ¡Me tienen aquí encerrado!

Hoseok siguió gritando esperanzado de que los dos chicos le escucharan, pero no funcionó porque ya dejó de escucharlos y allí nadie le respondió tan siquiera.

¿Por qué estaban allí? ¿Habían ido a buscarlo? Volvió a gritar por si lo escuchaban, pero lo único que consiguió es que los dos que lo estaban custodiando, aparecieran allí para mandarlo a callar.

Entonces fue cuando, con el ceño fruncido, Hoseok decidió que ya que había llamado la atención de esos dos paletos, se aprovecharía de la situación.

-Cállate, que no hay nadie que te pueda escuchar -Dijo uno de ellos, el que tenía la voz más gruesa.

-Bueno, sí que hay. Vosotros me habéis escuchado ¿No? Es un avance -Tenía que evitar que lo volvieran a dejar solo, así que si debía sacarlos de sus casillas, lo haría.

-No te pongas muy chulito, que aquí tienes las de perder -El mismo que se había dirigido a él, picó al responderle.

-No le hagas caso, te intenta liar -Escuchó decir al otro. Si se volvía a entrometer echaría a perder su plan.

-¿Le vas a hacer caso? ¿Es que no tienes opinión propia? -Con esas palabras, evitó que se diera la vuelta.- Así nunca vas a avanzar y te verás sometido a lo que te digan otros, sobre todo, los que van de enterados y creídos como tu compañero.

-Tienes razón… -Escuchó murmurar al de la voz grave, que lo observaba asintiendo con la cabeza.

-¡Ven ya! -Le exigió a gritos el otro, siendo la gota que colmaba el vaso.

-¡Y una mierda! ¡No pienso hacer lo que me ordenes porque no eres nadie! -Aquella tan repentina explosión por uno de sus captores, le dejaba entender que ahí había una historia detrás y que él había reventado a todo.

-¿Pero qué estás diciendo? ¿Vas a hacer caso a lo que te diga este mindundi? -Su compañero, extrañado ante su comportamiento que había surgido de la nada, no entendía nada.

-¡No es lo que diga! ¡Es que eres insoportable y no pienso hacer lo que me digas! ¡Esto es una estupidez! -El joven de la voz ronca, se fue de allí. Las voces del otro replicándole, le hicieron entender que se habían ido y lo habían dejado allí solo.

Una sonrisa traviesa afloró en su rostro. A veces era algo malvado. Pero ese lado malo suyo ahora parecía que le había servido para algo nuevo.

Poniéndose en pie como pudo, fue dando saltitos hasta la puerta por la que había salido su captor, que dejaba pasar la luz de ahí afuera. Fue muy cuidadoso cuando dejó pasar la cabeza por el hueco de la puerta para ver si estaba solo o había alguien allí.

Con las manos y los pies atados, vio vía libre, así que dando saltitos apareció en ese rellano, donde había un banco y una mesa. Atado no podría hacer mucho, así que buscó un objeto afilado con la que romper la cuerda que lo tenía atado por las extremidades.

Encontró con la mirada un trozo de cristal, por lo que fue directo hacia él. Como pudo, y con las manos atadas a la espalda, consiguió cogerlo que se encontraba en el suelo. Comenzó a frotar el borde del cristal contra la cuerda.

Estuvo unos minutos así, mirando a un lado y a otro con el temor de que alguno de sus captores volviera y lo pillaran así. Cuando la cuerda cedió y sintió sus muñecas libres, suspiró aliviado.

Una vez que tenía más manos más libres, podía desatarse los tobillos de forma más fácil. También le llevó un buen rato, pero acabó consiguiendo soltarse sin que nadie lo descubriese.

Aunque ahora llegaba lo peor. Tenía que salir de la sede de Yoonseung sin que lo pillasen. Eso sería más complicado, pero tenía un plan.

Salió de donde lo tenían secuestrado sin que nadie lo pillase y fue a buscar directamente un lugar donde poder ocultarse para ver cuál sería su siguiente paso. El corazón le latía a mil por hora y podía notar como la adrenalina le recorría entero.

Encontró un trozo de tela oscura, donde vio la oportunidad de escapar. Lo cogió y se lo puso sobre la cabeza, para que ahora no fuera tan fácil reconocerlo. Antes de salir de su nuevo escondite, echó un vistazo a todos los lugares por los que podía venir alguien o pudieran verlo.

Vio que esa era su oportunidad y no vaciló en salir y comenzar a andar cabizbajo. Tenía muchas ganas de salir de allí corriendo y más como descubrieran que no estaban allí encerrado y dieran la voz de alarma.

Los secuaces de Yoonseung pasaban a su lado sin darse cuenta de quién era. Estaba deseando salir de allí lo más rápido posible, pero si lo hacía, se delataría él solo.

Cuando salió de allí, sin que nadie le preguntase, lo detuviese o le pareciese sospechoso, buscó un sitio para perderse complemente de la vista de cualquiera. Una vez estuvo seguro que nadie lo veía, tiró el sucio trapo y comenzó a correr.

Si era verdad que Taehyung y Yoongi había ido a buscarlo hasta donde Yoonseung, no estarían muy lejos de allí. Quería alcanzarlos, decirles que ya estaba fuera, que lo había secuestrado y que no se preocuparan más.

Pero temía no encontrarlos antes de que hicieran algo extraño.