Título: Las gafas
Parejas: EunHae/HaeHyuk (Eunhyuk + Donghae)
Tipo: Yaoi.
Género: Lemon.
Advertencias: Contiene contenido para mayores de 16 años. Tal vez no sea a gusto de todos, ya que el seme es Hae y el uke es Hyuk.
Comentario: Fic dedicado para mi niñatuncia, que la quiero muchísimo.
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-Cuando terminen de ordenar su habitación los dejaremos salir -la voz de Leeteuk era firme y segura. Ellos dos sabían que las protestas ya no servirían de mucho. Y mucho menos con Leeteuk.- Nosotros nos iremos todos a dar una vuelta.
-¡¿Qué?! -las voces de Donghae y Eunhyuk sonaron a la vez sorprendidos.
-Lo que oyen. Tienen hasta que volvamos para solucionar ese desorden -la voz del líder ya sonaba lejana y un portazo en la puerta de la casa le confirmaron a los dos que se habían marchado ya.
Hae, el cual estaba apoyado en una de las paredes, se dejo caer al suelo, estirando sus piernas hacia delante.
Hyuk, por lo contrario, se quedo de pie, frente a él, dejando escapar de sus labios un suspiro pesado.
-¿Ahora que hacemos?
-Que vamos hacer… Pues ordenar esto.
-Yo no voy a ordenar lo que tú has desordenado -la voz de Hae era cortante y segura. Hyuk lo miró de reojo respondiendo le con un tono en su voz algo cabreado.
-Disculpa, pero este desorden se debe a tu falta de cabeza. Si tuvieras mejor memoria no estaría esto así.
-¡La culpa no es mía si me has perdido las gafas de sol!
-¡Yo no tengo tus gafas de sol!¿Para que la querría?
-¡Seguro que las cogiste para ponerse las al perro!
-Pero si… ¡Claro! Las gafas las tiene el perro.
-Estupendo y el perro esta fuera y nosotros aquí encerrados -esta vez un suspiro de resignación salió de Donghae.
Eunhyuk lo miró de reojo antes de acercarse hasta él, arodillandose enfrente suya.
-Perdóname -con carita de cachorro, Hyuk acarició la mejilla del menor. Este tan solamente apreciaba su precioso puchero- ¿Me perdonas?¿Hacemos las paces?
-Esta bien, esta bien -tras un momento de meditación, Hae le responde a su mayor con una sonrisa, y este sin perder mucho el tiempo, se abalanzó sobre los labios del pececito, deborandolos, mordiéndolos con lujuria. Hae le respondió como era habitual, pero lo separó un momento.- Esta vez me toca a mi.
-No ¿por qué?
-Por que tú has sido el culpable de esto, así que me lo merezco -ante las palabras del menor, Hyuk no pudo decir nada, que mas daba, él solo quería tenerlo para él. Ambos volvieron a unir sus labios en un beso fugaz e intenso. Ambos querían el sabor del otro.
Algo desesperado, el monito se deshizo de la camiseta del menor con rapidez, acariciando después algo lujurioso su abdomen y su perfecto pecho. Sus labios se dirigieron hacia su cuello de pez, donde empezó a mordisquear su piel, disfrutando de su delicioso sabor.
Como un acto reflejo, Hae encogió una pierna y rozó la entrepierna del mayor, provocando que este sintiera como una ola de calor empezaba a inundar su cuerpo. Al notar que aquello le había gustado, el pececito siguió rozándole con la rodilla, mientras echaba la cabeza hacía un lado, dejandole más espacio.
Aquel contacto empezaba a volverlo loco, cada vez mordía con más fuerza el cuello de su pez, haciendo que de los labios de este unos leves gemidos salieran introduciéndose en la cabeza de Hyuk, excitándolo más. De un salto se puso en pie. Cogió a Hae de la mano y lo ayudó a ponerse en pie también, pero este tenia otra intenciones.
Donghae empujó a Hyuk a la cama, desecha totalmente, subiéndose encima de él. Empezó a desnudarle quitando le la camisa. Como si no hubiera mejor cosa que hacer, los labios de Hae impactaron con el pecho del mayor, mas bien su lengua, la cual empezó a recorrerlo haciendo círculos, hasta aproximarse a un pezón, el cual no tardo mucho en morder.
Las manos de Eunhyuk recorrían la espalda del menor, le acariciaba y le arañaba con dulzura para no hacerle daño. El ver a su pescaito así estaba haciendo estragos en él, y más cuando Hae deslizó sus manos hasta su pantalón desabrochandolo, bajándolo junto a sus boxer, y agarrando su semi-erecto miembro, el cual no tardó en recibir algo de atención de la lengua del pececito, ya que había bajado lentamente por su abdomen lamiendole hasta llegar allí.
Con pequeños lametazos, Hae notaba como se endurecía cada vez más el miembro de su monito, el cual no dejaba de jadear con sus ojos entrecerrados.
-Entero, Hae -con una mano en su cabeza, enredando sus dedos con el pelo, Eunhyuk hizo que el menor introdujese todo su miembro en su cavidad bucal, haciéndole estremecer del placer. Sin dejar escapar mucho tiempo, Hae empezó a succionar su miembro mientras comenzaba un pequeño vaivén con su cabeza.
Para Hyuk aquello estaba siendo exquisito. Los labios y la juguetona lengua del menor le encantaban, lo extasiaban siempre, lo volvían completamente loco.
Sintió una especie de sacudida eléctrica cuando un tímido dedo empezó a rozar su entrada. No es que no quisiera aquello. Es que no quería volverse adicto. Aquel dedo se introdujo dentro de él cada vez más. Hyuk se mordía el labio. Los labios de Hae se encontraban justo ahora rodeando sus testículos mientras introducía tímidamente otro dedo de él, intentando dilatarle su entrada algo rápido. Se notaba que Hae estaba deseoso de estar dentro de su monito. Aquello no podía demorarse más.
Con la lujuria dibujada en su rostro, sobre todo en sus ojos, Hae se terminó de desvestir, quedando completamente desnudo. Con dulzura, cogió los pies del mayor y los puso por encima de sus hombros, agarrando con una mano su cadera, para que le fuera más fácil aquella intromisión en su mayor.
-No vayas a ser muy duro, Hae.
-Voy a ser como lo eres tú conmigo -con una sonrisa divertida dibujada en su cara, Hae empezó a invadir a Hyuk, entrando lentamente. La estrechez de aquel lugar le perseguía incluso en sueño. El mayor, con los ojos cerrados, sentía como era profanado cada vez más. Esta vez no le dolía como muchas otras veces. Supuso que ya se estaba empezando a acostumbrar.
Una vez que ya se encontraba totalmente dentro de él, Donghae empezó a mover sus caderas lentamente, echando su cuerpo sobre el del mayor, esperando que todo dolor desapareciese. Con un ligero movimiento, la mano de Hyuk acabó llegando al trasero del pececito, azotandolo algo fuerte. Este se mordió el labio y lo embistió una vez algo fuerte, sacando de la garganta de Hyuk un profundo y sonoro gemido. Volviendo a recuperar un movimiento de caderas seguido y placentero, Hae siguiendo con lo que había empezado antes. Siguió masturbando a su mayor, con la misma velocidad a la que sus caderas se movían.
Suspiros profundos, mezclados con gemidos, salían de los labios de Hae. Jadeos salían de los de Hyuk, que fueron acompañados de gemidos de puro placer cuando su pececito empezó a darle en aquella zona en la que le gustaba tanto que le diera. Sus manos apresaban con más fuerza el trasero de Hae, el cual no dejaba de masturbarlo con más rapidez, y sus propias caderas hacían que lo embistiera con más fuerza, degustando de mientras de la deliciosa piel que el monito le ofrecía.
-Ya-a.. No… A… -las palabras no podían salir de la boca de Eunhyuk, debido a que justo en ese momento una agradable sensación recorriendo su cuerpo, ahora toda su esencia se encontraba en su abdomen y en la mano del menor. Este, por su lado seguía masturbandolo y embistiéndolo mientras se mordía el labio. La presión que las estrechas paredes de Hyuk sobre su miembro, provocaron un deleitoso orgasmo, bañando el interior del mayor con toda su esencia.
Eunhyuk lo que esperaba era que su pez se tumbara a su lado, lo pudiera abrazar y descansar en su regazo. Lo que no se esperaba era lo que Hae hizo. Salio de dentro de él y no se recostó a su lado, si no que con su lengua comenzó a limpiar los restos de semen del mayor que había sobre su mano y sobre el abdomen del mayor.
–Tú no te cansas verdad? -Hyuk levantó la cabeza mirándolo con una sonrisa divertida. Hae levantó los ojos mirándolo fijamente mientras negaba con la cabeza. Riendo, el mayor dejó caer la cabeza sobre la almohada, dejándose limpiar.- Espero que tarden en volver los demás.
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